La verdad es que no existe una fórmula mágica que garantice que tu hijo nunca sufra acoso escolar, lo que popularmente se conoce como bullying. La buena noticia es que hay algunas cosas que puedes hacer para ayudar a prevenir y reducir el impacto que estas conductas de acoso e intimidación puedan tener en la vida y el futuro de tu hijo. Siguiendo esta línea, te mostramos cómo las artes marciales proporcionan herramientas efectivas para ayudar a detener el acoso escolar.
Está muy claro que el acoso escolar es mucho más un juego mental con burlas verbales, intimidación o agresiones físicas, que hacen que las víctimas se sientan inseguras e inferiores. Si no se aborda, esto puede llevar a los perjudicados a desarrollar o afianzar baja autoestima e inseguridad.
¿Qué es bullying?
Se entiende por bullying al acoso físico, verbal, emocional o mental repetido hacia un individuo percibido como más débil. Este acoso se fundamenta en el uso de una fuerza o influencia superior para intimidar a alguien, por lo general para obligarlo a hacer lo que quiere el acosador.
En otras palabras, se reconoce al acoso escolar como el desequilibrio de poder repetido en el que una persona usa su influjo, ya sea el tamaño físico, la fuerza, la popularidad o información personal sensible, para controlar, manipular y causar daño a otra persona.
Artes marciales para detener el acoso escolar
Las artes marciales brindan capacitación, consejos y herramientas efectivas para ayudar a tu hijo a disuadir y prevenir el acoso escolar, al brindarle los medios para lidiar con los problemas de intimidación a través de una instrucción eficaz y técnicas adecuadas.
A través del entrenamiento en artes marciales, los niños desarrollan confianza en sí mismos en la medida en que dominan las técnicas físicas, y gracias a sus logros en el tapete, desarrollan autoestima y seguridad.
Los acosadores suelen ser personas cobardes e inseguras, que de forma similar a los depredadores en el reino animal, generalmente buscan las presas más débiles. Las artes marciales les enseñan a los niños cómo manejar el miedo en un ambiente seguro, dándoles un lugar para practicar y mejorar su confianza, lo que suele ser suficiente para disuadir a un acosador.
Herramientas de prevención
El entrenamiento de artes marciales no solo tiene el potencial prevenir el acoso al aumentar la confianza, sino que también les enseña a los niños a no ser acosadores. Un lema que escucharás en cualquier gimnasio o dojo es: «deja tu ego en la puerta». Las artes marciales entrenan a tu hijo para que tenga confianza y sea humilde, lo que les proporciona una base para desarrollar empatía y desviarlos de comportamientos intimidatorios.
A pesar de enseñar habilidades de autodefensa, las artes marciales no fomentan la violencia; más bien, brindan herramientas para prevenir altercados, aunque ocasionalmente, será necesario responder físicamente. Las artes marciales pueden ayudar a tu hijo a contener a un acosador más grande que él a través de la velocidad, el poder, el estado físico y la técnica.
Idealmente, tu hijo nunca necesitará recurrir a sus habilidades de artes marciales físicas, ya que en primera instancia evitará que comience un altercado. Sin embargo, si alguna vez lo necesita, cuenta con un “plan B”, y esto hará que tu hijo tenga más confianza, más energía y, en general, más felicidad.