Día a día son más los programas que se desarrollan para impartir a las mujeres herramientas para enfrentarse ante situaciones de violencia de género, y el karate puede ser una herramienta de defensa personal femenina efectiva a la hora de luchar frente a este tema que no deja de tomar vigencia.
Dadas las cifras de víctimas que con el paso del tiempo engordan las estadísticas de ataques sexuales, violaciones o agresiones, las clases de karate se han convertido en una solución a la hora de proporcionar herramientas para que una mujer pueda defenderse de manera óptima. Si el tema te interesa, y quieres saber cómo protegerte a través de las artes marciales, quédate leyendos:
El Karate como lucha frente a la violencia de género
Con el paso del tiempo van aumentando la cantidad de mujeres que se apuntan a clases de karate como una forma de blindarse frente a la violencia de género. Y es que, va más allá de ser una práctica deportiva que fomenta la salud, esta disciplina aporta a las mujeres una serie de ventajas que pueden disminuir las probabilidades de que sean víctimas de un ataque o agresión particular.
- Proporcionan fuerza y agilidad: la práctica de las artes marciales fomenta la fuerza y la tonicidad muscular gracias a la intensidad de sus prácticas. De esta manera la mujer con constancia logra desarrollar la capacidad física y agilidad necesarias para lograr defenderse de ataques, dejando ver a los hombres que el sexo o tamaño no son condicionantes para permitir un abuso.
- Desarrollan confianza: el karate si se quiere es un potenciador del autoestima, y es que a medida que las mujeres avanzan en sus conocimientos y habilidades, desarrollan también sus fortalezas mentales al saberse capaces de aplicar técnicas y herramientas determinadas para ver situaciones potencialmente peligrosas y desarrollar de antemano una estrategia para prevenirlas o enfrentarlas de ser necesario.
- Aprenden a controlar cuerpo y mente: el karate es un deporte integral en el cual los entrenadores enseñan no solo golpes y formas de ataque, sino también técnicas para controlar los movimientos, y acompañarlos de una fuerza determinada. Es importante también la enseñanza sobre la parte emocional, y es que los atletas son entrenados en el manejo de las emociones, las cuales sabemos que pueden jugarles una mala pasada si no son adecuadamente controladas.
- Concentración: la disciplina asociada a la práctica fomenta la capacidad de concentración, clave para lograr la precisión en factores como la fuerza, desplazamiento y respiración, lo que maximiza sus posibilidades de conseguir mejores resultados en la práctica.
Los principios básicos del karate enseñan valores como constancia, disciplina, trabajo en equipo, característicos de cualquier deporte. Sin embargo, a las mujeres les aporta un plus adicional y es el empoderamiento.
Un entrenamiento personal en esta arte marcial en definitiva da esa sensación de independencia, la seguridad de poder valerse por sí mismas, y en definitiva, la visualización de un futuro seguro y prometedor al no tener miedo de enfrentarse a desafíos.