Kuzushi o romper el equilibrio de un oponente es probablemente uno de los aspectos más importantes del Jiu-Jitsu y muchas otras artes marciales. Vemos su importancia en casi todas las técnicas, ya sea un lanzamiento, un bloqueo o un golpe. Siendo así, hacemos una revisión de los fundamentos del Kuzushi.
Importancia de Kuzushi
Dentro de muchos estilos marciales, hay etapas dentro de una técnica que se desglosan para que un practicante pueda aprender mejor los principios que la conforman. En Jiu-Jitsu, estas etapas consisten en Kuzushi (Equilibrio), Tsukuri (Entrada) y Kake (Ejecución). Obviamente, es necesario lograr ingresar correctamente, de lo contrario, la técnica no se puede realizar.
Sin embargo, Kuzushi es necesario para garantizar que la técnica se pueda ejecutar. El principio de Ju o suavidad que subraya el arte nos muestra por qué es necesario Kuzushi. Al romper el equilibrio de un oponente y, por lo tanto, su capacidad para generar poder, le resultará difícil poder resistir tus ataques.
Centro de gravedad
Como animales, constantemente estamos en contacto con el suelo. Para que podamos caminar, correr o lanzar un puñetazo, tenemos que ser capaces de generar presión y torque a través de nuestros pies apoyados al suelo. Esta presión proviene de bajar nuestro centro de gravedad y alinear nuestros cuerpos de una manera particular. Por ejemplo, si tus caderas se mueven hacia adelante y más allá de los dedos de los pies, te caerás si no das un paso.
Al eliminar la capacidad de un atacante para sostener su centro de gravedad, una persona de menor estatura o de contextura corporal más débil puede derribar, lanzar o bloquear a una persona mucho más grande.
Usando un apalancamiento simple, se puede desequilibrar a un oponente con un esfuerzo mínimo. Esta idea de llevar el centro de gravedad a un punto en el que no esté apoyado es el fundamento principal que yace en el corazón de Kuzushi.
Kuzushi: multiplicador de fuerza
El resultado de usar Kuzushi es que permite maximizar toda la fuerza en el poder de la técnica, en lugar de luchar para que la técnica funcione. Por lo tanto, al aumentar el impulso de un oponente, es posible agregar el propio peso a los efectos de la gravedad con el fin de lograr el desequilibrio.
Esto se puede ver en Judo (sistema de proviene Kusushi), donde Tori (el que ejecuta la técnica) sigue a Uke (quien recibe el ataque) al suelo, aterrizando efectivamente sobre ellos. Si consideras que esto sucede en concreto o terreno duro, tal vez podamos comprender el poder detrás de un Kuzushi efectivo, y es que, en lugar de simplemente arrojar a una persona al suelo y levantarla de nuevo, estos lanzamientos pueden ser paralizantes si se ejecutan correctamente.
Aunque se trata de solo una parte del Jiu-Jitsu y otras artes marciales, es este principio de desequilibrar a un oponente, y la capacidad de que un individuo pequeño o débil pueda afectar a uno más grande, es lo que hace que Kuzushi sea tan práctico.
Finalmente, si bien las artes marciales asiáticas tienen una imagen de poder misterioso, es este simple uso de la mecánica corporal lo que permite a un artista marcial realizar hazañas aparentemente imposibles.