Aunque los golpes y patadas que vemos en TV encantan a todas las personas, a la hora de entrenar en Karate u otro arte marcial, debe ser un trabajo específico más científico para progresar y por ende, deberían utilizarse más los conocimientos actuales en anatomía y ciencia del movimiento para limitar el riesgo de lesiones de rodilla y cadera o el dolor de espalda que sufren tantas personas. Aprende cómo golpear sin lastimarte usando la cabeza como un arma natural.
Cabeza: un arma natural del cuerpo humano
Es muy difícil dibujar un mapa exhaustivo de las armas naturales de nuestro cuerpo. De hecho, cada centímetro del cuerpo se usa dependiendo de lo que desee hacer: golpear, empujar, tirar, girar, aplastar, apretar, lanzar, barrer, látigo, lux, pellizcar, rasgar, desgarrar, despedir, romper, rayar, reventar, asfixiar, paralizar, etc… Pero, con la parte superior particularmente, te mostramos las distintas formas de usar la cabeza como arma natural sin lastimarte.
Uso de la cabeza para la defensa personal
Si bien la cabeza se utiliza como arma natural para la defensa, debe usarse con precaución. Cada choque, causado o no en la cabeza, hace perder parte de su capital neuronal. Esto sería alrededor de 5,000 por descarga, además de las 20,000 perdidas diariamente en adultos.
Incluso, si el número parece ridículo comparado con nuestras 100 mil millones de neuronas, también es recomendable no descuidarlas. Por otro lado, usar las diferentes partes de la cabeza como ariete requiere un excelente entrenamiento para endurecer los elementos de golpe y los músculos del cuello. De lo contrario, se pueden producir dolores de cabeza innecesarios.
De la cabeza puedes usar: la frente, los lados prominentes del cráneo, la parte posterior de la cabeza – occipucio, la barbilla, los dientes, etc. En general, cualquier parte que forme un crecimiento: orejas, nariz, pómulos, mandíbulas… se puede utilizar como punto de presión. Solo tienes que elegir tu objetivo.
La frente (Hitai o Sento)
Este es el famoso «golpe de bola». Los resultados son bastante espectaculares pero no obstante es fundamental tener un buen hábito de este tipo de movimiento.
Los lados prominentes del cráneo
Al igual que la frente, estas partes se pueden utilizar para golpes laterales en la nariz, la barbilla o para ejercer presión sobre áreas frágiles del oponente.
La parte posterior de la cabeza – occipucio (Kotobu)
Esta es una buena técnica para deshacerte de un agarre trasero de dos brazos. La nariz del agresor, inconsciente, es entonces el blanco privilegiado.
La barbilla (Ago)
El mentón es por naturaleza bastante frágil a los golpes, sin embargo, debido a su forma y dureza, es muy adecuado para ejercer una fuerte presión sobre puntos estratégicos esparcidos por todo el cuerpo humano.
Dientes (Ha)
Si morder, además de nuestra comida, ya no es un acto natural en los adultos, los dientes son armas efectivamente dolorosas para deshacerse de situaciones a veces trágicas. Las mordidas afectan absolutamente a todas las partes del cuerpo.
Sin dudas, la cabeza es una potente arma para utilizar en algunas prácticas de defensa personal, pero aún más para defenderte de algún ataque en una situación de asalto en la calle.