Las mujeres solemos tener una estructura corporal de menores proporciones que los hombres. Esto nos puede hacer susceptibles de sufrir de ataques, robos, agresiones sexuales, intentos o amenazas. ¿Qué puedes hacer y qué necesitas aprender?

Estos trucos sobre defensa personal para mujeres te ayudarán a estar más preparada y te permitirán zafarte de una agresión y huir de la situación de peligro.

Antes de empezar 

Recuerda que la defensa personal para mujeres busca dar herramientas básicas para favorecer un escape. No es necesario que te conviertas en una estrella de las artes marciales para resguardar tu vida, ni tampoco que te caigas a puños y patadas con el agresor. No.

La idea es aprovechar el factor sorpresa para ponerlo a tu favor. Este factor sorpresivo es ese instante en que el atacante te creerá débil y no se espera una respuesta de tu parte. Casi siempre ocurre al principio de la agresión o ataque. 

Lo primero es estar alerta y preparada mental y físicamente para convencer a tu mente, día a día, de que no eres un ser indefenso. Estos ejercicios ayudan:

• Controla tus miedos. Practica la respiración abdominal para bajar la ansiedad y el miedo. Llena tu abdomen de aire, deja que se infle como un globo y exhala suavemente. Repite varias veces, antes o después de hacer tu ejercicios diarios. 
• Imagina situaciones atemorizantes. Analiza qué emociones te producen estas situaciones y cuáles pudieran paralizarte de terror. Trabaja en ellas.
• Practica técnicas de inmovilización y escape. Ensaya luxaciones interfalángicas, cómo hacer llaves, cómo golpear con fuerza en la rodilla,  pierna, ingle, mentón o cómo cambiar el centro de gravedad de un agresor para alejarlo de ti.

Claves de defensa personal para mujeres 

Las técnicas de pateo de defensa personal para mujeres sacan provecho a la elasticidad y movilidad de las articulaciones femeninas que suelen ser 10% mayores que la de los hombres.

Los especialistas en autodefensa recomiendan las técnicas de pateo para tumbar al piso a agresores que pueden incluso doblar tu peso. Para empezar, concéntrate en cómo aprender a lanzar tres patadas en tres movimientos seguidos. 

Por ejemplo, combina una patada en el abdomen de tu agresor, aplica otra en la parte interna de su pierna o patea de lado su rodilla para que lo hagas caer. Finaliza con una patada o golpe de mazo con el puño en su espalda. Luego huye.

Otra fórmula efectiva son las llaves y armlock. Son técnicas que requieren de habilidad y poca fuerza. Si te atacan de frente y te toman por la ropa, sujeta el brazo de tu agresor, muévete y cambia su centro de gravedad proyectándolo hacia el piso. Este tipo de llave se llama kata guruma.  

Practica varios golpes

Una técnica muy eficaz es golpear directamente al mentón del agresor, desde abajo hacia arriba. Esto lo dejará aturdido inmediatamente y te sirve para huir si el ataque es de frente y cercano. 

Un pañuelo, bufanda, bastón, palo o paraguas puede ser una efectiva arma de autodefensa para inmovilizar por el cuello, golpear fuerte o causar dolor. También tomar un dedo o mano y girarlos hacia posiciones contrarias y dolorosas.

Es recomendable  practicar este tipo de movimientos en una clase de defensa personal para mujeres, ya que si no lo haces con la rapidez necesaria, pueden volverse contra ti.

Igualmente, si intentas caer después de aplicar una tijera con tus piernas o tratas de estrangular a tu atacante. Solo un instructor de autodefensa podrá guiarte en este tipo de  movimientos exigentes.